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Y es que eso son los espesantes naturales, aditivos que se incorporan a otro alimento líquido para ayudarnos a variar su textura sin modificar demasiado su sabor final.
La consistencia es una cualidad importante en la elaboración de algunas preparaciones saladas como salsas, sopas, caldos…, o en preparaciones dulces como mermeladas, natillas, flanes…y hasta en la elaboración de panes y masas sin gluten.
Hay muchos espesantes naturales. Si bien es cierto que, por tradición, los espesantes naturales procedentes de las harinas han sido los más utilizados, también es cierto que hay otras opciones vegetales que nos ofrecen la textura final que buscamos en nuestras recetas.
Además de ser de origen vegetal, proceden de cultivos ecológicos, sin ingredientes químicos, cumpliendo las normas que nos garantizan su calidad y la preservación del medio ambiente.
Dentro de ellas tenemos, en primer lugar, las harinas espesantes, destacando las de maíz o la de tapioca, el agar-agar: una sustancia gelatinosa que se obtiene de las algas, raíces espesantes como el arrurruz y kuzu, gomas como gomar guar y garrofín: la primera procede de un haba y la segunda de la algarroba y el psysillium que se usa tanto como laxante como espesante y aglutinante en cocina para la elaboración de panes y masas sin gluten.
ESPESANTE NATURAL PARA MERMELADAS
En primer lugar, es conveniente entender como se hace la mermelada. Es un alimento que se elabora a base de fruta, algún ingrediente que ayude a endulzar como azúcar, zumo de manzana o agave y algún espesante con acción gelificante como la pectina o el agar-agar.
La pectina es una fibra presente de forma natural en las pieles de muchas frutas y funciona como un espesante natural pues al unirse con los ácidos de la fruta y los azúcares forma geles, lo que hace que las mermeladas, confituras, compotas y conservas se espesen sin necesidad de añadir otros ingredientes para lograr una adecuada consistencia.
Entre las frutas con mayor cantidad de pectina nos encontramos las manzanas, limones, naranjas, arándanos, grosellas y membrillos, entre otras. Sin embargo, las fresas, albaricoques, melocotones y frambuesas son frutas con escasa pectina.
Esa es la razón por la que al preparar mermeladas caseras se consigue que espesen unas mejor que otras. Para estos casos donde es difícil espesar, podemos usar el agar-agar.
Es una gelatina vegetal que se obtiene a partir de algas marinas. No aporta ningún sabor, solo textura y funciona muy bien para mermeladas, proporcionando la consistencia deseada.
COMPRAR ESPESANTES NATURALES PARA ALIMENTOS
Los espesantes naturales pueden ser de origen animal o vegetal y permiten dar consistencia a una preparación sin perder su esencia.
En el mercado hay muchas opciones, pero en este artículo en especial nos hemos referido a los de origen vegetal. Entre los espesantes de origen animal tenemos la gelatina que procede de una proteína llamada colágeno que se encuentra en los tejidos animales, constitutivo de la piel, tendones y huesos. También podemos incluir el huevo, la yema de huevo, crema de leche entre otros.
Hoy en día, es muy fácil conseguir estos espesantes naturales en los supermercados y tiendas, pero si son ecológicos mucho mejor. Las tiendas bio online ofrecen una amplia variedad de este tipo de productos, garantizando su calidad y procedencia.
Espesantes naturales para alimentos online
Una de las opciones para comprar espesantes naturales es por Internet. Hay una variedad de tiendas que ofrecen estos espesantes, pero si te decides a comprar online, optas por un servicio que está disponible las 24 horas del día todos los días del año, sin necesidad de movilizarte y con la facilidad de que te pueden llevar los productos a tu domicilio sin desplazamientos.
En nuestra tienda bio Ekoena, estamos conscientes de tus necesidades y por eso queremos ofrecerte espesantes naturales de calidad y con la finalidad de contribuir a cuidar de tu bienestar respetando el medio ambiente.
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